Tuesday, February 23, 2010

Cumbre del Grupo de Río.

Tal vez lo más rescatable de la reunión de mandatarios latinoamericanos y caribeños (ha sido el Presidente Leonel Fernández quien hizo el distingo de nuestros pueblos, que comparten una historia común, y que viven en diferentes regiones) fue la propuesta de crear una organización de países americanos sin la presencia de Estados Unidos y Canadá. Hay que tener inocencia para no darse cuenta que el mecanismo de la OEA (Organización de Estados Americanos) es una oficina más del gobierno norteamericano, los más maliciosos dirán que una oficina apéndice del Departamento de Estado. Es bien reconocida la vocación diplomática de México, que tuvo la iniciativa de crear una nueva organización. El llamado se hizo desde Playa del Carmen, lugar turístico del Caribe mexicano. Es de distinguirse enormemente la presencia del Comandante Raúl Castro Ruz, presidente de Cuba, participando en el marco de la organización CALC (Cumbre de América Latina y el Caribe). Pero de nueva cuenta la intriga, el discurso beligerante y las comparaciones fuera de lugar del señor Uribe de Colombia, que dio un comportamiento impropio de un Jefe de Estado. Los grandes medios de comunicación, con toda seguridad habrán de pintar como villano al Presidente Hugo Chávez, que no hizo más que aclarar y responder a los infundios uribistas, palabras de intriga que mañana serán anécdota de un mandatario que ya se va (por fin) del gobierno colombiano. El gran ausente ha sido el Sr. Lobo, de Honduras, por la triste realidad que se vive en el pequeño gran país centroamericano, que a nuestra consideración, ha logrado una cierta normalidad democrática y al que debe darse el beneficio de la duda más que el aislamiento y sanciones inmerecidas, no para los gorilas culpables del Golpe de Estado del 28-J, sino para el pueblo catracho que no puede seguir sufriendo más.
No podemos dejar de mencionar al Presidente Evo Morales Ayma, que fue recibido en Ciudad de México (cuyo Alcalde es emanado de un partido de izquierda, el mismo de Andrés Manuel López Obrador) con todos los honores, y luego en una plaza pública de la capital azteca, ovacionado por diversos sindicatos, organizaciones sociales y congresistas de la Oposición. "Algún día México se liberará" palabras de aliento y sabiduría ancestral representadas en el Camarada Evo Morales (completamos la frase, se liberará de la corrupción, de la violencia, del marasmo, de la apatía, para ser el gran gigante americano que merece ser).
CLPRS.

Saturday, February 13, 2010

Debate en México.

El siguiente es un artículo del doctor Jorfe Majfud. Trata sobre cierto debate de tipo social y trascendido a la política que se está dando en México. En otros países pareciera que este tipo de cosas son banales y desde hace mucho tiempo ya superadas. Tal vez sea por la fácil permeabilidad de la doble moral norteamericana como se puedan entender este tipo de historias. Es el mismo doble discurso de "las buenas conciencias" del escritor Carlos Fuentes, o en un referente más trivial la película británica "la guerra de los chocolates". Para sonreír un poco con la estupidez del líder religioso y el ingenio del doctor Majfud.


La moral de los perros

El arzobispo Antonio Chedraui se ha hecho célebre en los mass media de México por su posición contra los matrimonios del mismo sexo. En diferentes sermones, discursos y entrevistas ha repetido que no pretende meterse en la vida privada de nadie. Su objetivo, como el de tantos otros, es la defensa de la familia. No aclara a cuál familia o a la familia de quién se está refiriendo, lo que demuestra que la simplificación no es un método exclusivo de los políticos. Por lo pronto podemos inferir que no se trata de defender la familia de Luis y Mario ni la de María y Luisa sino la familia de José María y María José.

El arzobispo y sus seguidores respetan a aquellos que se han desviado del camino. Según ellos, gays y lesbianas pueden practicar sus placeres en la intimidad sin que la Iglesia y los guardianes de la buena moral intenten impedírselo. Finalmente, tienen permiso oficial.

Pero éste no es realmente el punto central. Ni en tiempos de la más cruda inquisición, los guardianes de la moral tenían esta facultad de impedir una relación sexual. Por el contrario, muchos de ellos fueron reconocidos practicantes del sexo ilícito. De vez en cuando encarcelaban o quemaban vivo a algún pecador hereje, pero estos detalles, que servían para controlar la sociedad valiéndose del terrorismo y la tortura, no impidieron nunca el amor equivocado.

El punto en discusión radica en si nosotros, los heterosexuales, vamos a seguir disfrutando de todos los derechos civiles mientras se los negamos por ley a los homosexuales. Si realmente no nos queremos meter en sus vidas privadas, ¿por qué les negamos derechos humanos según sus prácticas sexuales? Incluso, se los negamos aunque de hecho una pareja gay o lesbiana vivan juntos y nunca tengan relaciones sexuales. ¿Acaso no existe el amor sin sexo, ese amor platónico que tanto recomienda el Papa? Según la Iglesia y quienes se oponen a los matrimonios del mismo sexo, no. Lo niegan con sus mismos actos. ¿Acaso no hay matrimonios heterosexuales que nunca o casi nunca tienen relaciones sexuales? Sí, de otra forma los psicólogos no tendrían tanto trabajo. No practican el sexo pero de cualquier forma son reconocidos por las leyes que los protegen.

Es decir, la oposición al matrimonio del mismo sexo no busca impedir la práctica pecaminosa, porque de hecho no puede. Lo único que procura y de hecho ha logrado siempre es prevenir que algunos seres humanos tengan los mismos derechos civiles que gozan los demás. Esto no es otra cosa que más del castigo divino que los religiosos han pretendido administrar durante siglos. No están dispuestos a perder ese privilegio de ser los policías de Dios. Su método es simple y efectivo: confundir la tradición con la naturaleza.

Ahora, ¿cómo definimos qué es normal y qué no?

El arzobispo Antonio Chedraui tiene la respuesta. El 19 de enero de 2010 por Milenio Televisón dictó cátedra. “Lo anormal no puede ser normal”. Por si no había sido claro y contundente, lo repitió dos veces. La periodista de Milenio —donde publicamos cada domingo desde hace años nuestras perplejidades—, con la modestia propia de un fiel que está ante un santo, le agradeció la claridad.

Motivado, el arzobispo volvió a la carga con uno de sus argumentos preferidos. “¿Usted vio alguna vez un animal, un perro teniendo relaciones sexuales con otro perro del mismo sexo?” dijo, poco antes de que se escuchara un ladrido.

El arzobispo giró su cabeza para ver al pobre animalito, ese fiel amigo recluido entre las altas murallas de su patio privado. Ladró una vez más. El animalito lo debía considerar un dios, por lo que el ladrido debía ser una plegaria.

En realidad el arzobispo no es Dios, sino su vocero en la tierra.

“¿Vio alguna vez un perro teniendo relaciones sexuales con otro perro del mismo sexo?”, insistió.

Entonces pensé que quizás en el Cono Sur los animales son más promiscuos o pervertidos que en México. En mis vacaciones en la granja de mi abuelo muchas veces observé alguna que otra vaca montando otras vacas, algún que otro perrito besando o lamiendo el pene de otro perro, razón por la cual recibió un terrible palazo de mi parte.

Lo que sí no he visto nunca, en ninguna parte del mundo, fue a ningún animalito de Dios practicando el celibato por voluntad propia.

Claro que quizás no puedo hablar con propiedad porque todavía no conozco la Antártida ni el país de los recientemente desaparecidos bo de las islas Andaman.

Claro que los animales no son seres humanos y no podemos comparar. Los humanos son superiores porque practican el celibato, la castración, la persecución de brujas y todo tipo de anormales, siempre en nombre de la buena moral. Cuando no en nombre de Dios.
Jorge Majfud

6 de febrero de 2010

Tuesday, February 9, 2010

Situación Política en Costa Rica.

En el país centroamericano se confirmó lo que ya anunciaban las encuestas: la candidata oficialista, que había ocupado previamente los cargos de ministra de justicia y vicepresidenta, Laura Chinchilla, ganó la elección presidencial con el 42 por ciento de los votos emitidos, postulada por el Partido de la Liberación Nacional, una agrupación política de corte claramente conservador. La expectativa que despierta la Sra. Chinchilla es clara: continuidad de la política de Oscar Arias, aunque con tentaciones (siempre) de tipo más hacia el conservadurismo. Sin embargo los retos deben exhibirse, pues siendo que para el mundo y la región, el país Tico maneja muy bien su imagen de paraíso turístico latinoamericano, comprometido con el medio ambiente y la paz, debe verse la realidad de pobreza en que vive la mayoría de sus habitantes, la creciente violencia e inseguridad, el narcotráfico y los riesgos que implica de paramilitarismo y derechización; el turismo sexual de menores, el deterioro de los indicadores sociales y económicos. En un discurso reciente y según el sitio de Internet FPB, Chinchilla afirmó -de manera obvia y tardía- que Centroamérica corre el riesgo de ser el último campo de batalla de la guerra que se libra en México y Colombia.
Santo Domingo, República Dominicana.
Camarada Benigno.

Tuesday, February 2, 2010

Estos días.

Yo no tengo palabras. A veces pasa. Es una limitante que nos pasa a todos alguna vez, lo supongo.
No tengo que decir. Me quedo con los textos de Marco A. Gándasegui hijo, de Jorge Mafjud, el espléndido escrito de Eduardo Galeano que leí en el blog del camarada José Luis. Yo no tengo palabras. Me quedo con el recuerdo de las injusticias, la condición humana. Me quedo con las imágenes de CNN. Con la deuda impagable -esa sí- de las potencias para con sus antiguas colonias. Me quedo sin palabras, con el recuerdo la letra H, la letra muda, letra de Humanidad, de Holocausto, de Hambre, de Hijos, Hijas, Historia, historias, con ese magnífico artículo de Gustavo Duch que comienza:

Le tocó a este país iniciarse con la letra muda, la letra que no se oye pero que está. Con la hache de país herido por los cuatro costados. De tierras, viviendas y naturaleza hundida. De huesos esparcidos entre amasijos de hierros y cascotes. «Caravanas de cuerpos abatidos. / Todo vendajes, penas y pañuelos: / todo camillas donde a los heridos / se les quiebran las fuerzas y los vuelos».

Después de eso, mis palabras salen sobrando. Solidaridad, apoyo y trabajo con nuestros Hermanos, con H mayúscula.