Ya es noviembre.

Me encuentro en la ciudad de Antigua, Guatemala. Desde el balcón del hotel miro una ciudad tranquila, el cielo está limpio, los edificios son muy bellos. Así pienso en mi América, de muchas caras, de mucha belleza, pero todavía llena de injusticias.

1. El 23 de este mes se celebran elecciones para alcaldes, gobernadores y diputados en Venezuela. Participan el PSUV, chavista, el PPT (Partido patria para todos), entre otras fuerzas políticas. Invitamos a nuestros amigos, nuestros hermanos latinoamericanos a votar en paz, y a reflexionar sobre el proceso de cambio y progreso que encabeza el Gobierno de nuestro amigo Hugo, a reflexionar su voto de confianza para nuestro amigo.

2. Aquí cerca, al norte, se han reunido Uribe y Calderón. El primero ha sido invitado a una gran cumbre de empresarios norteamericanos que se celebra en México. Nuestros deseos y mejores ánimos para que las fuerzas que están del lado de los poderosos, y de los capitales, rectifiquen el rumbo, que le den un sentido auténtico y social a sus acciones y políticas. Queremos una mejor América.

3. En Nicaragua, lamentamos los actos de barbarie que mancharon las elecciones municipales del pasado domingo 9 de noviembre. Reprobamos los atentados a la paz y la tranquilidad de nuestros amigos nicaragûenses, perpetrados por los derechistas de la Alianza Liberal, partidarios de la Alianza Liberal de Nicaragua: así no se pierden las elecciones. Las elecciones se pierden, aceptando la derrota. La fortaleza de una democracia reside en gran medida, en que los perdedores acepten los resultados. No es la violencia el camino para dirimir diferencias. Organismos bastante respetables, como la OEA y el Centro Carter, han validado y observado la gran jornada de participación ciudadana del 9-N. Los resultados son contundentes: Ha triunfado el Frente Sandinista de Liberación Nacional, ganando un total de 91 municipios. Le sigue el PLC, con 48, y otros, como ALN, con resultados menores.

4. En Estados Unidos, ha sido electo el señor Obama. Nada que decir. Buena fe y ánimo al buen pueblo norteamericano.