Recientemente el gobierno de Colombia ha recomendado a sus connacionales no visitar Venezuela, alegando un "clima de inseguridad" imperante en ese país. Las historias dentro de este contexto van desde el arresto de personal de inteligencia al servicio del Uribismo operando en el vecino país, la crisis causada por la invasión colombianoyanqui al Ecuador en busca de guerrilleros de las Farc, el intercambio de declaraciones entre ambos presidentes en la pasada cumbre de Playa del Carmen. Por si fuera poco, más recientemente el Departamento de Estado recomienda a sus compatriotas norteamericanos no visitar al vecino México en el puntual periodo que va del 12 de abril al 12 de mayo, debido también a un clima de inseguridad, y más específicamente por el poco claro asesinato de tres personas vinculadas al consulado de Juárez y por ataques con granadas al consulado de Nuevo Laredo. Lo que queremos exponer en este espacio es cuestionar la autoridad con la que Colombia pudiera recomendar a los colombianos a no visitar Venezuela. Un país que es el mayor productor de drogas en el mundo, con un gobierno que está empeñado en exterminar una guerrilla que en cincuenta años no ha podido ser erradicada con las armas, con un presidente guerrero y belicoso que ha invadido países vecinos con sus fuerzas militares, que poco ha abonado al proceso de liberación de prisioneros en manos de las FARC, y que usa estas cuatro siglas para golpear a sus enemigos políticos (La senadora Piedad Córdova ahora es toda una farquista por obra y gracia de las fuerzas de seguridad uribistas).
Del país del norte hay tanto que decir, pero señalaremos primero, que no es posible que se quejen de que en su vecino, México, hay una creciente violencia por armas de fuego, si en el estado de Texas, o California, o Arizona, las armas de fuego son vendidas como hamburguesas de Burger King en cualquier negocio, y llevadas a ciudades mexicanas donde ningún ciudadano común puede adquirirlas. Son los mayores consumidores de droga en el mundo, los creadores de Rambo, de la triste telenovela Columbine, de videojuegos atroces en los que el que mata más, gana más, de esa creciente glamourización del vicio, y si no vean a Lindsay, que todavía ha tenido finales felices, porque es rica, y al chico Corey, que tuvo un final triste, porque acabó en la peor pobreza luego de que Hollywood le dio todo y le quitó todo. Pero no visiten México, es un país envilecido, corrupto, inseguro, violento...
Yeah Right, Mrs. Clinton. Of course it is.
1 comment:
Que curioso que los mas criminales aconsejen a sus ciudadanos no visitar al vecino. Supongo que es el mecanismo de la neurosis: no aceptar las miserias propias (en este caso sangrientas) y proyectarlas hacia el otro.
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